Dada la experiencia en el quehacer Peronista de muchos años, quisiera darles a los jóvenes algunas ideas para sus futuros compromisos a favor de la República, ya que no pueden permanecer indiferentes cuando está en juego el futuro de la Nación, en cada coyuntura histórica donde deben poner en marcha su energía y gran entusiasmo, aprovechando el saber y la experiencia de los mayores.
Es el cambio generacional y paulatino, poniendo en esa lucha diaria su accionar como personas de bien, una conducta edificada sobre los valores éticos y morales, en defensa de su destino común, en sus limpias manos.
Pero esa juventud debe ser grande por su dignidad, capacitándose doctrinariamente para ser garantía de nuestra conducción partidaria, y reemplazar a los políticos caducos y mentirosos, gente sin escrúpulos que pueblan los partidos políticos, amigos de predicar virtudes que no practican.
Nuestros jóvenes deben realizar todo su quehacer con amor al prójimo, no deben perder de vista que la evolución de los hechos, nos demuestra que los partidos políticos demoliberales pertenecieron al siglo XIX, que están totalmente superados, habiendo desaparecido en varios países.
Los jóvenes peronistas deben saber que la fuerza del Peronismo radica en su convicción de Movimiento Nacional y no de partido político, que debe ir actualizando la forma de ejecución de su ideología (las 20 Verdades), lo que quiere decir realizar la doctrina actualizando su teoría de aplicación, adaptándose a las nuevas formas impuestas por la evolución, en donde deben tener una real participación todos los argentinos.
A esto el Gral. Perón le llamó una Democracia Social, pero conducida por las manos insobornables del Pueblo.
Nuestros jóvenes deben demostrar comprensión y tolerancia hacia todos los argentinos, resolviendo los problemas por la razón y no por la violencia, pensando que por medio de esta Democracia Social los llevará a eliminar la miseria en medio de la abundancia en esta Argentina, por la que todos luchamos y sufrimos, poniendo toda nuestra imaginación y creatividad para lograr nuestra liberación.
El rumbo a seguir lo dejó marcado nuestro Líder, el Gral. Perón, en su Comunidad Organizada y en el Proyecto Nacional.
Esta pasión en la lucha por el país, enaltecerá a nuestros jóvenes que siempre deben recordar las palabras de la Compañera Evita cuando decía: “No hay revolución sin espíritu revolucionario. El Peronismo será revolucionario o no será nada”.
Tomando el concepto de Revolución del Peronista, que no consiste en asesinar a nadie, sino en cambiar las estructuras que hacen daño a la Nación, para adaptarlas a lo que más convenga al país.
